CUARTA NOCHE DE CHARLY GARCÍA EN EL REX, INVITADOS; HILDA LIZARAZU, OS PARALAMAS Y JUANSE

Reseña: Charly García.-No es que me haya dejado de gustar Charly, en mi casa siempre se escuchó mucho rock nacional y a diferencia de gran parte del Staff Cotorra, a mi ese género me gusta mucho. Sin embargo, no estaba dispuesta a pagar 160 pesos por una entrada, pero una amiga me invitó a último momento y no pude negarme.
El show es en el Gran Rex y está muy bien puesto, a diferencia de otros recitales de Charly en donde pagabas lo mismo por verlo a él sentado en el piso con Celeste Cid a upa.
Arrancó puntual (no me quiero ni acordar una vez que fui y tardó una hora cuarenta minutos en empezar, el muy papiento) con una pantalla gigante, con las tapas de los discos de él como solista, con Serú, Sui Generis, La Máquina, mientras tanto sonaban pequeños fragmentos de canciones de esos discos. Esa parte me pareció genial.
Al ratito, con todo el público ya al palo, apareció en el escenario, vestido de monje, o de farmacéutico, vaya uno a saber, con una gran gran capa verde. La gente se descontroló, ¡gente grande, señores! (Mención aparte para el público charlista).El gordo tenía un lompa de látex negro y un saco de pana azul recontra canchero, siempre flotando por el escenario e interactuando con la gente. Después se cambió por un saco rojo, o al revés, pero siempre mucha onda.
La banda que tocó con él se llama "The Prostitution” y suena lindo. El Negro García López (tener de nombre dos apellidos me parece TODO) la rompió en la guitarra, el Zorrito (llevame a pasear) Quintiero pasó bastante desapercibido, te diré, con esos tecladitos y muy grosas las cuerdas en manos de no se quiénes.
El error de la noche: Rosarito Ortega. Primero y principal no está a la altura de ninguna corista que haya tenido Charly, pobre María Gabriela, se revuelca en su tumba mapuche. No tiene ritmo, parece una Bandana, está perdida en el escenario y para colmo tiene 15 años. Yo digo: para estar con un tipo así en el escenario, o mostrás las tetas en papel etérea o rompés todo. No, Rosarito, NO, tenés menos pogo y rocanrol que Los Nocheros.
Cuando estaba terminando rogué “que toque Funky” y con esa se despidió.
Invitados: Paralamas Do Suceso, me pone triste en esa silla de ruedas, pobre Hebert Vianna, pero tocó en versión samba "Hablando a tu corazón" y estuvo bello. Para el final entró Hilda y la rockeó a pleno, enseñándole a esa chiquita lo que es un show.
El Público: la gente está completamente loca. Había algunos customizados como Charly en cualquiera de sus looks, otros niños con aparatos que daban muy Nacional Buenos Aires, mucha Converse de lona negra con cordones rojos, brazaletes de SNM. Hubo gente que lloró con “Desarma y Sangra” y parejas que tranzaban, sí, TRANZABAN cuando sonó “Viernes 3 AM”. Pero el premio de la noche se lo llevó un personaje hermoso que no sólo bailó toda la noche y agitó como loco sino que le gritaba cosas a Charly como “te amo, forro”.
Y bueno, la vanguardia es así!

Por: Rocío
Fuente: Revista Cotorra